El aceite de almendras dulces se extrae del fruto del almendro, un árbol de la misma familia del melocotonero y el albaricoquero, pero que a diferencia de éstos produce una fruta no comestible ya que es poco carnosa, dura y seca. Sin embargo, dentro del hueso de esta fruta poco apetecible se encuentra la almendra, que según la variedad del árbol puede ser amarga o dulce, de ésta última se extrae un aceite de color amarillo claro, con extraordinarias propiedades nutritivas y calmantes, conocido como aceite de almendras dulces.

Este aceite viene siendo utilizado desde épocas remotas, ya en el antiguo Egipto era empleado por los faraones y la alta sociedad para masajes, como ingrediente en ungüentos e incluso para comer con el pan, ya que además de aportar beneficios a la piel, su ingesta ofrece interesantes propiedades digestivas y medicinales que os contaré unas líneas abajo.

 

Propiedades y formas de utilizar el aceite de almendras dulces

El aceite de almendras dulces es rico en varias vitaminas, pero especialmente en vitamina A que ayuda a mejorar la elasticidad de la piel y en vitamina E que acelera la reparación de las células. Tiene también un alto porcentaje de proteínas y minerales, contiene potasio, fósforo, calcio, magnesio, hierro, zinc y cobre, lo cual le otorga importantes virtudes en el caso de su uso interno. Veamos los beneficios y propiedades del aceite de almendras en función del uso que le deis:

Uso externo o cosmético

aceite de almendras dulces

Aceite de almendras dulces

Este aceite es ampliamente reconocido y utilizado en cosmética por sus propiedades hidratantes, calmantes y suavizantes. Aplicándolo en forma de masaje sobre la piel, el aceite de almendras reduce las irritaciones, inflamaciones y las estrías, se puede aplicar tanto en piel seca, como en piel grasa. Es un producto muy suave y sin contraindicaciones, de ahí que se utilice habitualmente en la piel de los bebés, por tanto es muy apropiado para pieles sensibles.

Yo utilizo mucho el aceite de almendras dulces como desmaquillante, es ideal para zonas sensibles de la piel como el contorno de ojos y labios, os lo recomiendo.

Ver: Cómo desmaquillarse con aceite de almendras

Si lo deseáis emplear en masajes, podéis usarlo puro o mezclado con otros aceites esenciales o vegetales.  Nutre e hidrata la piel y ayuda a prevenir los labios agrietados. Es especialmente recomendable para casos de pieles excesivamente deshidratadas o muy maltratadas.

Debido a sus eficaces propiedades anti-inflamatorias, el aceite de almendras se utiliza como tratamiento para diversos problemas de la piel tales como eczemas, erupciones, pequeñas quemaduras superficiales, dermatitis, prurito y quemaduras solares.

Y por si fuese poco, además de lo anterior, el aceite de almendras dulces aporta también muchos beneficios para el cabello, lo tonifica y revitaliza. Fortalece el cabello dañado, le devuelve el brillo y suavidad, incluso ayuda a eliminar la caspa.

Uso interno

Internamente, el aceite de almendras dulces actúa como un excelente laxante, suave y no irritante. Reduce la inflamación digestiva, ayuda en la absorción de los cálculos renales y es muy recomendable para aliviar la tos, favoreciendo además a la eliminación del moco bronquial.

No hay que olvidar que la almendra es un fruto seco, por tanto su uso interno no es recomendable en personas con alergia a las nueces.

 

Bueno, como habéis leído este aceite natural es un gran aliado en el cuidado personal, tiene muchas aplicaciones y virtudes, algunas quizás poco conocidas por vosotras, espero hayáis encontrado interesante esta información, en futuras publicaciones os hablaré un poco más sobre los usos y propiedades del aceite de almendras dulces.